lunes, 26 de diciembre de 2011

Capítulo 16.

Anoche hablé con Rubén y, mientras lo hacía, estuve leyendo la entrada de ayer.
Las lágrimas se abalanzaron sobre mí. Y llorando me quedé.
¿Acaso la gente puede llorar por nada que no existió?
Ese encuentro solo vivió en mis sueños, durante una noche de 6 horas. ¿Por qué lloro tan fácilmente que no ocurrió ni ocurrirá?
¿Por qué sigo llorando y esperando una promesa que no se cumplirá?
Quizá porque soy una estúpida.
Quizá porque soy una ilusa.
Porque, pese a hacerme la madura, sigo pensando en ello como una cría que esas cosas se cumplen. Pero no es verdad, nadie va a cumplir una promesa hecha a una desconocida.

domingo, 25 de diciembre de 2011

Capítulo 15.

Esta noche te he soñado. He soñado que bajabas a Madrid, que venías a verme y que cumplías tu promesa.
Soñé que iba a estar contigo como tú me prometiste.
Fui a al hotel en el que te alojabas, subí a tu habitación contigo en el ascensor; te miré y sonreí.
-Kos, dirás lo que quieras pero me pareces mono. -sonreíste y te vi más guapo aún. Y no, no estaba soñando con Brad Pitt ni Matt Damon, estaba soñando contigo. Con las pocas imágenes que tengo de ti. Llegamos a tu cuarto y te tumbaste, estabas cansado del viaje en coche, Bilbao está muy lejos ¿verdad?
-Ven, peque, túmbate conmigo. .y sin más dilación, salté sobre aquella cama, me tumbé a tu lado mientras miraba tus ojos cerrarse. Te dormiste, y yo, mientras, te acariciaba, pensando en todo lo que esperaba hacer contigo.
Anoche soñé que tumbado en aquella cama de hotel, te miraba de arriba a abajo, pensaba que eras lo más simpático y mono del planeta, sin importarme tu edad. Y de pronto, en ese sueño, acercaba mis labios a tu cara y te daba un pequeño beso en la mejilla, que abrías los ojos:
-No quería despertarte, lo siento.
-No importa. -sabía que no te importaba pero aún así, seguí acariciándote. De repente, en alguna habitación puso la radio y se oyó a Bonnie Tyler cantar. Y me levanté rumbo al baño, cantando suavemente esa canción. De verdad, no quería molestarte.
Anoche soñé que mientras me duchaba en aquel baño, tú entraste y te duchaste conmigo. Y mientras compartíamos gel y champú, me besaste. Tenías los labios suaves y me volví adicta a ellos. Y mientras te aclaraba el agua, te volví a besar, un beso largo y con pasión. Entonces, en volandas, me tumbaste sobre la cama y seguimos aquel juego sexual que nunca antes había deseado tanto.
Anoche soñé que conseguía hacerte mío, y que llevaba esos tacones tanto te gustan y ese vestido a un restaurante y que me mirabas de esa forma tan peculiar tuya. Y cuando salimos de ese restaurante me murmuraste en el oído:
-Estás preciosa. -yo enrojecí. -Y así lo estás más.
Sonreí, en aquel sueño, sonreí porque sabía que en ese sueño eras mío.
Y no paro de pensar, ahora que estoy despierta, que ojalá pasara todo eso, que consiguiera enamorarte como lo conseguí en el sueño. Pienso tantas cosas sobre ti y sobre mí, que alguna me sorprendo pensando en esas conversaciones por MSN. Donde ya no te veo, ni en el Aion ni en el Skype. Te echo de menos, Grandullón, vuelve a mí.

Capítulo 14.

Entré en mi vida de Internet. MSN, Skype, Facebook y twitter.
Y en Skype rezaba el buenas noche de Rubén:
"cariño
quiero que sepas que va a ser el mejor fin de año de mi vida
contigo a mi lado
y que sepas que no voy solo por un polvo
sino que quiero compartir mi vida contigo
te quiero cielo
y eso no va a cambiar
solo espero poder demostrartelo en tan poco tiempo
tengo miedo de no gustarte y cuando me vuelva lo pases mal o te olvides de mi
pero merece la pena arriesgar
por alguien tan especial como tú
te quiero mi vida
buenas noches
un besazo".
La verdad es que no me acordaba de lo poco que habíamos hablado ayer.

Recuerdo la mañana anterior, saliendo de casa a las 10:45-11:00 para hacerme los análisis que me había pedido mi ginecóloga, yendo hasta Velázquez. Paseando con una prenda de manga larga y fina, un jersey de cuello vuelto de color blanco y suave, mis tacones grises que me había comprado en un arrebato en el Merkal de Torrevieja. No eran muy incómodos pero solo había ido un par de veces con ellos u otros tacones. Recuerda aquellas sandalias que se compró en Marypaz para ir a la graduación, eran preciosas y cómodas; para después le había pedido a mi madre que me comprase unas cuñas con el mismo estampado, en leopardo blanco. Luego aquellas botas tan altas y preciosas que me ponía para hacer saber a Isma que deseaba que me montase.
Por la tarde, me llamó Karla para quedar, hoy iría por haber faltado unos días antes. Quedamos y nos fuimos al Plaza Norte, paseamos por las miles de tiendas. Fuimos a saludar a las antiguas compañeras de trabajo de Karla. Patricia estaba atendiendo como podía a la clientela mientras nos contaba las novedades del trabajo y de las chicas que conocíamos.
Después paseamos por todo el Plaza, acabando en el McDonalds, ella tomando unas tortitas con Nesquick y yo un Sundae. Más calorías para mi cuerpo que no las necesitaba, pero ella sí. Yo siempre flipo cómo una mujer tan delgada puede zamparse tal cantidad de comida y seguir así. Seguimos andando y buscaba la tienda que me habló Almudena, la amiga de mi hermana, llamada Deni y que tenían los pendientes de coco que siempre andaba buscando.
La encontramos y encontré mis pendientes ansiados.
-¡Sólo tres euros! -comenté a Karla.
-Después de esto nos vamos a mi casa, ¿vale?
-Claro. -los compré y salimos a coger el autobús. Estuvimos esperando el 156 como unos diez minutos.
Llegamos a su casa y nos tiramos en la cama. De pronto, pensé en la posibilidad de que Pepo y ella hubieron tenido relaciones en aquella cama.
-No lo habréis hecho aquí, ¿verdad?
-Sí pero he cambiado las sábanas esta mañana. -suspiré tranquila. Desde la noche que me tocó dormir en la misma habitación que ellos y se pusieron a hacerlo, tenía miedo a todo lo que tenía que ver con Pepo, Karla y una cama.
Nos pusimos con la cena a eso de las 23:00-23:14. Con la excusa de Karla de que ella solía cenar con Pepo ¡a las dos de la madrugada! Yo no podía cenar a las 2 de la mañana. Mis padres me matarían por no avisar.
-Hacemos la cena para mí. -comenté. -Y luego haces la tuya y de Pepo.
-¿Cómo puedes tener hambre?
-Porque suelo cenar a horas decentes.
Durante la cena, hablamos de todo. De tantas cosas que muchas se arremolinan en mi memoria y se revuelven y mezclan. Salí de su casa para llegar a las 00:02 a la mía.
Llegué y mi abuela estaba viendo a Sobera en Atrapa un Millón. Con un padre y una niña, su hija imagino, que estaban dudando entre Flan o Tocino de cielo. "¿Cómo se puede ser tan tonto?" Después de oír a la niña hablar: "¿Cómo pueden existir niñas tan repelentes?"
Mi padre estaba en el portátil, mirando su correo y la poca vida en la red que poseía.
Mi hermana se ocupa de su Facebook.
-Ahora te dejo.
-Sin problemas. -con el único que tenía que hablar era con Rubén. Y cuando se quitó, eso hice...

En la vida en red que tengo, veía un montón de mensajes de: ¡Feliz Navidad!
Yo no odio la Navidad, solo la detesto. Detesto que mi madre, como siempre, me diga que me tengo que vestir para sentarme a cenar lo de casi todos los años, gambones a la plancha con sal; pero hoy, como novedad, teníamos una especie de pastel vegetal.
Cuando nos sentamos a cenar, estuvimos viendo el especial de Sergio Dalma.
-¡Feliz Nochebuena!
Eso decían todos los canales que mis padres ponían. Mi hermana, Celia, y yo nos entreteníamos pinchándonos un poco para no estar tan aburridas, pero cada vez que hacíamos algo mi madre nos criticaba o chillaba.
 Así que decidí irme a mi habitación y seguir jugando al Resident Evil 4 y aunque no iba muy bien situada en ese momento, era para apartar mis nervios a la que iba a pasar en Nochevieja.
Estaba nerviosa por ver de una vez a Rubén. ¿Qué pasaría en Nochevieja?

lunes, 19 de diciembre de 2011

Delgadez.

Quisiera mil veces ser más delgada.
Tener ese tipo de cuerpos que todo el mundo mira y fotografía en su mente, Me gustaría llevar una 36 o una 38, poder ponerme esa ropa que tanto me gusta llevar, los corsés, las minifaldas, los ligueros... Todo aquello que siempre quise llevar. Quisiera llevar mis pantalones anchos con mi ropa interior cantosa y que la gente no girase la cara, si no que se fijase.
Me gustaría tener un cuerpo que la gente envidiase, sin que costase demasiado por ejemplo, unas horas en el gimnasio. No tener que mirarme en el espejo y que se me cayesen todos los piropos al suelo, rompiéndose en mil pedazos. Tampoco quiero una delgadez extrema. Solo quiero ser normal.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Capítulo 13.

Hoy vuelve a sentirse usada por otro hombre.
Un hombre que la dice que no la usa.
"¡Mentira!" explota su mente. Parece que nunca aprende la lección, si Charlie la llama no es para hablar y ya está pero siempre cae en la misma trampa. ¡Siempre! Parece tonta. Siempre el mismo método. Sí, es tonta; siempre llevándose arrastrar por sus palabras zalameras, meterse en su coche y dejarse llevar a cualquier lado.
Solo es una chica fácil. Una chica fácil que todos se quieren follar pero que nadie se quiere enamorar. Y con nada nuevo tío que aparece, nueva decepción.
Ni siquiera Isma se corta para esconder las verdaderas intenciones.
Ella es la muñeca sin corazón que todos usan, descargan y abandonan; sabe que nadie más la mirará a la cara; se siente humillada, confundida e idiota. Con cada nueva conquista se siente más manipulable, más estúpida y más fácil, más vacía, más tonta por creer en cuentos de hadas.
Con cada chico que la ha llevado a ese huerto, más abandonada e inútil se siente; más miserable.
No tiene amigos de verdad, amigas con las que hablar pero no para desahogarse y decir que ella quiere emborracharse, que le dé un fallo hepático e irse al otro barrio, porque así no estará hasta el cuello de problemas y malestar.

viernes, 16 de diciembre de 2011

Sentimientos Malos que se convierten.

Siente celos.
¿Por qué todo lo bueno solo le pasa a los demás?
Su mejor amiga ha encontrado novio.
Motivos de celos número 1.
Un chico ha conseguido una ganga.
Motivos de envidia número 2.
Ve como los demás se lo pasan de puta madre por Madrid, cuando ella no puede.
Motivos de desprecio número 3.
Los odia, se sienta a mirar por la ventana y odia a cada uno de esos pequeños cabrones que tienen suerte y ella no la tiene. Quiere odiarles y lo hará.

Capítulo 12.

Hoy, ha dormido hasta tarde.
Rubén la ha llamado a las 10.
Hablan de banalidades.

Come carne con patatas cocidas. Una comida que su madre no sabe hacer muy bien.
Corre a la academia de inglés, no llega tarde, ni pronto, llega a la hora. Se sienta en su lugar e intenta que Corinne, su profesora, no la pique demasiado. La verdad es que incluso, cuando ella no se enfada ni le recrimina ciertas cosas, puede que la profesora sea afable.

Después, repasa un poco lo estudiado en clase. Pero la hora se le hace corta... Solo le da tiempo para repasar el romanticismo.
"Por favor, que Pablo pregunte el Romanticismo." piensa Lara. Pablo es el profesor de Lengua Catellana y Literatura del Bachillerato Nocturno del Giner de los Ríos.
Pero sus pensamientos no son oídos, toca el Realismo y sus autores.
-Joder. -susurra cuando Pablo entrega los exámenes. -Y eso que ha dicho Clara que entraría el Romanticismo. ¡Qué putada! Encima todo lo demás sé poco. -antes del examen ha estado hablando con Clara, una de las compañeras de Lara en el curso. Han estado intercambiando información, Lara le decía lo que entraba en Inglés y Clara lo que le habían dicho que entraba para el de Lengua.
El caso es que en algunas preguntas se enrolla y piensa en lo que ha dado en clase, lo poco que ha ido.
-El próximo trimestre vendré siempre. -susurra y promete entre dientes.
Termina el examen y ha quedado con Isma en Callao. Son las 19:35, coge el autobús C11 de Alcobendas, y se sienta a leer mientras espera que llegue a la parada de Valdelasfuentes de Renfe. Y el tren no llega, mira la hora y son las 20:30, e Isma la espera en Callao, cagándose en ella lo más probable.
Llega el transporte y ella suspira aliviada.
Un cuarto de hora más tarde está en Sol, subiendo corriendo a Callao. Llamando desesperadamente a Isma, e incluso le manda un mensaje. Pero llega a Callao y allí no hay nadie esperándola y refunfuña, llora y da patadas al aire para desfogar la decepción y la furia.
-Al final, le daré el puto dinero y que se compre lo que él quiera. -grita y todos los paseantes la miran. -Pero ya que he traído dinero, voy a la FNAC y me autoregalo un libro.
¡Qué mujer! ¡Siempre se está regalando libros! Hace 4 meses se compró Agua Para Elefantes, hace un mes One Day y Naked, ahora otro libro más. Sube a la cuarta planta y los recuerdos llenan su cabeza.

Adolfo, vestido de forma normal y ella con los pantalones anchos y la camiseta naranja; entonces no tenía el pelo rojo. Ella le había buscado por toda la sección librera de la 3ª planta. Hasta que él la llamó:
-¿Dónde estás tardona?
-En el piso de librería, ¿dónde estás tú?
-En el ÚLTIMO piso de librería. -ella subió corriendo por las escaleras mecánicas. No vio a Adolfo pero él sí la mirada a ella. Se acerco a ella hasta que: -Sé que estás detrás. -dice sonriente y él se siente un poco engañado por su falsa indiferencia.

Luego más recuerdos. Un beso robado en plena plaza de Sol, ella volviéndole a besar. Una amor que parecía bonito y no fue nada más que una estrella fugaz que se estrelló contra la realidad.

Encuentra un libro para ella: El diablo viste de Prada, uno para su madre: Señoras y criadas y para Isma:  Zombi, guía de supervivencia.
-Bueno, ya tengo uno. -aunque se enfada de que Isma la haya vuelto a dejar plantada.
Vuelve a Sol, no quiero coger ningún sub-urbano, quiere ver Madrid pero son las 21:52, está en Madrid y debería estar en casa. Recorre toda la calle hasta que da con un autobús que la deja en Recoletos, mientras mira por los ventanales, se sorprende pensando en Rubén.
"Quisiera que estuvieras aquí. Que me acompañases y vieses todas las calles y edificios de Madrid, enseñarte esas fachadas, quizá, victorianas; aquella mujer ángel de Metropoli, que vieses lo bonitas que están las calles con los adornos navideños. Sin embargo, no estás aquí, ni lo estarás.
Quisiera hacer el amor en una habitación de hotel, mientras fuera se ven las luces. Poder recorrer contigo aquellas calles que tanto me gustan, como hacen todos los enamorados que viven en Madrid."
Llega a Plaza de Castilla, donde sale del autobús número 27 y va en busca del 153.
-¡Joeeeeeeeeee! -exclama cabreada. -¡Hasta las 22:50 no llega el 153 y yo sin llaves de casa!
Sube un piso y se mete en el metro y empieza a devorar El diablo viste de Prada el cual, no se parece casi en nada a la película. Sale del Metro en Manuel de Falla y va lo más rápido que puede andar hasta casa.
-Ahora podría llamarme Rubén. ¡Jolines! -echa tanto de menos su voz que se sorprende a sí misma diciendo esas cosas. ¿Acaso se estará enamorando de él?

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Capítulo 11.

Hoy se ha levantado tarde, sonriendo.
Y es que Rubén le ha dicho muchas cosas por el pequeño jugueteo y voz calenturienta.
"cari
esta noche me has dejado loco
menudo derroche de erotismo, sensualidad
eres impresionante
nunca con nadie por cam me había hecho esto tres veces seguidas como hoy
eres increíble
 por otra parte me alegro que tú también hayas disfrutado
yo cerraba lo ojos y te imaginaba
ha sido impresionante
y espero volver a repetirlo y a ser posible que se haga realidad muchas de las cosas que hemos imaginado hoy
te quiero mi lunita y descansa
un beso de tu lunero"
Claro.
Ella es la reina de bastos.
La que nada la frena.
Ella es, de vez en cuando, una ninfómana; solo durante unos días, luego ya vuelve a ser normal. Se levanta sonriente y con sueño.
No se viste. Se mete directamente al Aion y coge todo aquello que necesitan de ella.

Rubén la llama al poco tiempo y ella le sale la vena mala. Y le pica, le habla con voz sensual y emite pequeños gemidos, le oye a él jadear y ponerse.
Luego sigue a lo suyo.

Por la tarde queda con una de sus mejores amigas, Rachel.
La verdad es que quería hablar con ella.
Compartir cosas.
-¿Sabes? Últimamente mis padres -dice ella sin aplacar sus intenciones. -tienen más vida social que yo. Mi madre siempre me dice que si no tengo nadie con quien salir. Yo siempre le respondo que no tengo amigas.
-¿Y Mari y yo qué somos? -responde su amiga un poco herida.
-No me refiero a eso. -contesta ella sin perder la compostura. -Me refiero a que ya no salgo casi nada de casa. Tú y Mari tenéis vuestros chicos y os movéis por los círculos de ellos... Yo me quedo sola sin nadie con quien salir.
-¿Y Karla?
-Otra que está fuera de combate. -dice Lara resignada. -Otra vez a vuelto con Pepo y es horroroso. Me empiezo a plantear que no debería haber dejado a Isma.
Las dos se quedan calladas. Quizá las dos piensan lo mismo, que fue demasiado lanzada para tirarse a los brazos de otro.
-¿Y qué tal con él? -rompe el silencio Lara.
-Bien. Aunque faltos de sexo. -sonríe.
-¿Sabes? Dice Rubén que quiere venir a Madrid.
-¿Cuándo?
-En Navidades si puede.
-Entonces estarás feliz ¿no?
-Pues... -duda un momento. -creo que debería estarlo pero no dejo de pensar en que no es lo mismo para él que para mí.
-¿Qué os pasa? -dice Rachel mientras miran peluches en el Disney Store.
-Es que... él siempre está diciendo que está enamorado de mí y que soy la mujer de su vida. Y a mí me gusta pero no creo que nunca sienta eso por él. Porque ¿y si todo fuera mal? ¿Qué cara debería ponerle yo?
-Ninguna. Él se arriesga a perder o ganar todo.
Después charlan sobre cosas banales.
Miran tiendas, como dos amigas normales. Van al Arroyo de la Vega. Miran y requetemiran las tiendas de maquillaje.
-Debería empezar a hacerme el kit completo.
-Sí. Lo necesitarás para currar.
Miran, buscan y rebuscan; Rachel se coge una raya de 2€ y Lara se gasta en mil cosas 11€. Dentro de lo que cabe, siguen coincidiendo en muchas cosas.
-Pues a ver cuando os veo a ti y a Nico.
-A Nico...
-¿Qué? -dice Lara arqueando una ceja.
-No es que le caigas muy bien.
-¡¿Qué?! Si fui yo quien sugerí que volvierais. -se siente traicionada.
-Ya. Pero fuiste tú quien estuvo preocupándose y sofocándole.
-Claro. -dice Lara al defensiva. -Le veía muy mal y solo quería que volvieseis. Ojalá le atropellen con un kart.
-¡Oye!
«¿Dónde se dice que la amistad vale más que el amor? Porque esta chica no lo ha leído.» piensa Lara dentro de sí. Está furiosa.
Deja a Rachel en la parada del autobús y baja andando hasta el Giner. Y mientras hace un monologo externo:
-Debería cambiar. -empieza. -Ya no solo adelgazar lo que me sobra si no ser más... como Rachel. Soy basta, burra y malhablada. ¿Qué chico se fijaría en alguien como yo? No soy guapa, no tengo un cuerpo 10... Debería cambiar, pero cambiar como soy me costará meses y no es tan fácil. Es algo que me dejó Isma y que no quiero perder. -Quizá debería comprar ropa nueva y cambiar de look, volverse más como todo el mundo espera que ella sea. -Empezar a llevar tacones, a vestir ajustado, dejar de teñirme el pelo de rojo y dejar de llevar camisetas heavies. Cambiar mi músic... Ni de broma cambio mi música. Ella es la que me hace sentir yo.
A ella le gustaría ser como esas chicas delgadas con chicha, que se pueden el permitir el lujo de ir con camisetas con las que ella debe soñar. Marcar su propio estilo.

Entonces le da un toque a Rubén y él la llama:
-¿Qué pasa cari?
-Nada. Que tenía ganas de oírte, solo eso.

Ahora una pregunta para los Ilusionados.
¿Creéis que debería cambiar?

martes, 13 de diciembre de 2011

Capitulo 10.

Hoy no es un día bueno.
Ni malo.
Es un día normal.

Ella se levanta pronto, sobre las 9 o así. Piensa en que le toca hoy. Mira el reloj y piensa que le quedan un par de horas de no hacer nada. Y le pica la lujuria y el encanto de su sueño erótico.
Se tumba en la cama tras haber bajado sus braguitas de la noche anterior, busca en Redtube su vídeo favorito de lesbianas y el calor sube, la entrepierna se moja.
Ella, después de masajear sus pezones, baja una mano hacia su entrepierna mojada; coge un poco de los fluidos y los utiliza para su clítoris. Y, al ritmo que aquella pareja erótica, ella se moja cada vez más, gime cada vez más, sube un poco el tono; hasta que se siente explotar con el sale un gemido alto y potente.

Cuando se ha relajado lo suficiente, se levanta y se mete en la ducha. Jabona su cuerpo bajo el grifo de la ducha, pone champú en su mano y masajea su cuero cabelludo. Y de su pelo rojo, emanan pequeños hilos de agua roja. El tinte va cayendo por el desagüe. Quisiera que su color rojo perdurase para siempre.
Cuando sale de la ducha, se pone al ordenador. Tiene ganas de picar a Rubén pero recuerda que está en clase...  "Mierda." maldice en su fuero interno.
Cuando se termina de vestir, viene su padre.
Desde la entrada corre hacia el baño de su habitación.
Ella sigue a lo suyo atenta a la hora, y rayándose porque cree que hoy es el día del examen de Redes.

Sube al autobús y se da cuenta de que no ha llevado los cascos. Maldice la estampa de los cascos.
De pronto se acuerda, Rubén la llamaría así que no lo pasaría tan aburrido. La llama y charlan, hasta que llega a clase.
-Chicos, chicos. Voy a decir los grupos y la gente que puede ir al examen.
Lara no puede ir. No ha dado la media suficiente en los ejercicios de clase.
"¡Qué buen pleno si tampoco puedo ir al de Seguridad!" piensa, no muy contenta.

Cuando sale de clase, llega a casa. Cansada del módulo. Siente volver a caer bajo la mirada de decepción que pondría su madre y la bronca de su padre al ser repitiendo. Menos mal que por lo menos se podría concentrar en los del Bachiller y sacarlos todos con una nota más o menos buena.

Por la tarde entra al Aion y un pequeño roce con Ori.
"¡¡Qué ganas de tirar a la legión a la mierda!!"
Encima había quedado con Isma para una sesión desestresante pero con la tontería, se le ha quitado las ganas.
-Venga, que te voy a hacer lo que nadie te ha hecho.
-Isma, de verdad que no tengo ganas. -responde ella. -Te prometo otra sesión en otro momento.
-¿Qué ha pasado?
Le cuenta los roces de la legión del Aion.
-Bueno, tranquila, pronto estaré yo para protegerte. -sonríen. Cuando está con Isma siente paz, no se siente metida en el mar de dudas en el que está siempre.
Y se acuerda de lo que tiene pendiente en las torres Quio.
-Espera un momento que voy a hacer una cosa.
-De acuerdo. -pero no se está quieto, quiere ver que escribe. -¿Quién es Madrid?
-¡Qué gracioso eres! -dice ella sarcásticamente.
Y es que ella, ama Madrid. Quizá, por ello, no pueda amar a un chico.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Capítulo 9.

-Hace 88 años que nací, y ¡miradme! Estoy hecha una chavala.
La abuela de Lara se sentía dichosa por estar cumpliendo su octogésimoctavo cumpleaños con sus dos hijos, la madre de Lara, Maribel; y su tío, Fali, sus nietos:
Cristina. Chica alta y delgada, de pelo negro y largo, ojos grandes y negros, nariz estilo Julio César, heredada de su abuelo paterno, boca carnosa y cuidada. Es una de las primas de Lara, una de las más jóvenes, de 27 años. Estudia la carrera de Medicina y se graduará este año, Lara no sabe en que rama lo hará pero podría ser en cirujana estética para quitarle todo aquello que no la gusta de ella. Y a Celia le encanta que su prima fuese azafata de vuelo.
Miguel Ángel. Es el único primo de Lara. Se llevan nueve meses (ella es del 4 de Julio de 1991 y él es del 17 de Abril de 1992) y han pasado prácticamente toda su infancia y juventud juntos. Tienen mil trastadas juntos, miles de recuerdos... Es alto (más que su hermana), delgado (demasiado delgado), de pelo corto y castaño oscuro, ojos grandes y negros (como su hermana) escondidos tras unas gafas de montura al aire.
Celia. La hermana de Lara. Con el pelo a media melena, ondulado y negro, un poco más alta que Lara, de ojos grandes y negros, con pestañas enormes y nariz como la de sus primos, estilo César. labios finos pero hidratados, es delgada aunque ella se empeña en que está gorda (no lo está). Tiene 15 años.
Lara. Protagonista de estas crónicas. Tiene 20 años. De estatura media, gordita, ojos verdes azulados con toques grisáceos de noche, nariz recta y bonita, boca con el labio de abajo carnoso mientras que el de arriba es fino, lleva el pelo cortado como Hayley y con de color rojo pasión.

Y de comer, hay arroz con bogavante preparado por su tía Emi. Y ríen y bromas, y conoce a Mila, la novia de su primo.
-Ya tenía ganas de conocerte.
-¿Y eso? -dice ella sorprendida y halagada. -Seguro que Miguel ha hablado mal de mí.
-Todo lo contrario. Me ha contado todas las trastadas que hacíais juntos. -se sonríen. La verdad es que le parece simpática, bastante amable y mona. Y las risas, los comentarios... todo se sucede.
-Vamos a dar una vuelta. -dice Mila.
-Vale. -dice él. -¿Te vienes Lara?
-¿A dónde?
-Vamos a Naval, así dejamos a Casas. -comenta él. Casas es el novio formal de Cristina.
-Vale. Voy. -dice ella contenta.
-Entonces, -dice su prima. -llevaros también a Celia. Se va a aburrir ella sola aquí.
-¿Te quieres venir? -dice Mila.
-Es que... no sé...
-Vamos, Celia, que no vamos al fin del mundo. -dice Lara.

Toda la tarde en el R-5 de su primo, dando vueltas y vueltas. Riendo, bromeando, fumando, intercambiando observaciones... Ha pasado de todo.
Ha tenido una de las primeras prácticas en coche. Teniendo 20 años, la da vergüenza que su primo menor le de clases, pero aún así lo pasa bien. Tiene arrancones, acelerones y caladas.

Vuelven al chalet de sus tíos sobre las 20:34. Se sientan en el sillón, miran Dos hombres y medio, American Dad y Los Simpson.
-Tú. -dice su madre a su padre. -Son las casi las diez. ¡Vámonos!
Pero, como siempre, antes de una despedida hay bronca. Bronca entre los padres de ella, montan el numerito. No sabe si es por el alcohol ingerido, el rencor del uno hacia el otro... Puede que nunca lo sepa.
Lara tiene ganas de irse, todos le preguntan por su mala cara. «¿Acaso nadie se da cuenta de nada? Mis padres no solo son así fuera de casa, también lo son dentro.»
Está harta de oírles discutir.
En el coche, todo es silencioso, solo la radio y ella susurrando las canciones.
Se siente mal. Y en una canción, se siente invadida por su sentimiento de no ser importante para nadie.
"-Ya tenía ganas de conocerte."
"-Miguel siempre habla mucho de ti."
Las palabras de Mila resuenan por su cabeza.
 "A ver, hemos estado juntos casi desde que nacimos." Recuerda la foto de cuando tenían pocos años, salen vestidos de chulapos y dándose un beso. Y recuerda aquellas palabras de su primo:
-Yo quiero que seas mi mujer. -pero entonces eran demasiado pequeños para comprometerse a nada. Quiere a su primo como si se tratase de su hermano. Lo han pasado de todo juntos, desde risas y travesuras a pelis porno y broncas.
Ellos y su complicidad.
Ellos y su pequeña fraternidad, que cada vez se hace más débil.

Luego recuerda a Kos, sus conversaciones, sus tonterías... Últimamente, él no sale de su cabeza. No paran de dar vueltas las conversaciones, los sms.
También recuerda que Rubén pronto bajará a Madrid con Jose.
 "Debería prepararles algo gordo." de pronto ve pancartas de tela y pintadas en contra de los recortes de Sanidad y Educación.  "Podría colgar carteles en los puentes de la A-6." Algo espectacular y poco visto. Se sonríe para sí misma. Debería no hacerlo o quizá sí. Pero lo piensa y probablemente lo haga.

Llegan a casa, un tercero en Alcobendas.
-¡Joder! -dice su hermana mientras sus padres no están cerca de ellas. -¿Por qué siempre tiene que haber numeritos fuera de casa?
-Quizá, un día, se divorcien.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Capítulo 8.

Y Rubén se afana en que será feliz con ella.
-Me gustan más las chicas bohemias.
Pero Lara no es solo bohemia, no es solo creativa y filósofa, no es solo una persona que piensa que el mundo no debería regirse por el dinero o disfruta de las cosas pequeñas, ella es bipolar. Que ahora quiere eso, que ahora no lo quiere, que está de mal humor y, de pronto, sonríe. Además, de poliamorosa, le gusta él, le gusta Diens, le gusta Pablo, le gusta el otro Pablo... En realidad si pudiera elegir se quedaría con Diens.
"¿Por qué me gusta tanto Diens cuando no nos parecemos en nada? Nos pasamos el tiempo regañando y metiéndonos entre nosotros." piensa pero sabe perfectamente porque es, Diens le gusta porque es abierto, simpático, guapo (ya se la había comentado la amiga de su hermana, Almu) y tiene unos ojos espectaculares. Quizá porque es el tipo de chico que siempre le ha gustado.
Pero él no se fijará en ella, ella solo es cantosa. No es guapa, no es espectacular, no es Mery.

La verdad, ¿qué podría hacer? Él ya no habla con ella como antes. Ya no hablan con confianza.
Quizá lo han perdido todo, ojalá aquel día no hubiera aparecido ella, ojalá que se hubieran conocido porque, ella sigue pensando que él es majo, que le gustaría conocerle y ser colegas. ¿Qué más da que no haya nada más?

Se sienta delante del ordenador y no espera nada.
Piensa en el Ice Chocolate que se ha tomado esta mañana, en el dependiente guapo y de ojos claros; alto y rubio que también se llama Rubén.
Quisiera poder dar el primer paso, hacer de su ticket, una nota llena de cosas bonitas. Y mientras le mira ir de aquí para allí suena Eros Ramazzotti, y sueña con ese tipo de cosas. Y piensa en que le gustaría ver los ojos de Diens tan de cerca como los de aquel dependiente.
Y piensa en las fotos de Diens. En esos ojos azul-verdosos que muestran todas las fotos. ¿Cómo puede perderse en los ojos de una foto?

Capítulo 7.

Hoy es un día de locos.
Es la semana de los días salteados.
Hoy se ha levantado pronto, cuando ha sonado su alarma a las 10. Le ha costado levantarse porque tenía un sueño precioso.
Desayuna y se lava los dientes; tiene que estar presentable para Pablo, el de los ojos gris luna.
Pero cuando llega al dentista no está, se entristece un poco pero allí está Rosa para hacerla sonreír.
-Odio el invierno. -dice la joven.
-Yo también. -dice Lara. -Ojalá siempre fuese verano. ¿No mudamos a la playa?
-Ojalá pero me gusta demasiado Madrid. -dice la recepcionista pizpireta.
"Otra que adora Madrid, como yo." piensa. A Lara le encanta Madrid, no sabe por qué. Quizá porque no conoce otras ciudades, quizá porque casi no ha salido de Madrid. Pero Madrid es su ciudad preferida, le gustaría nunca dejarla; poder tener trabajo allí, enseñar la magia que tiene Madrid.
Madrid es la ciudad favorita de Lara porque tiene zonas verdes enormes y un montón de bosques; también hay una ciudad con glamour con sus esculturas romanas, sus miles de siglos esperando en cada rincón y el arte, el arte que se respira en cada calle. Los miles de museos que están en cada rincón de cualquier calle.
El dentista tarda más de lo debido.
-No me va a dar tiempo para ir a pagar el First. -murmura. Y así es, cuando termina, es casi hora de irse a clase.

Coge el autobús, pensando en lo que le dijo a Rubén.
Y ella es bohemia, demasiado soñadora. Piensa vivir en un ático de parquet y paredes forradas de papel. Y su amor sería con alguien con el que sentarse en aquella casa bohemia, besarle y cantarle canciones mientras aprende a tocar la guitarra; dar pequeños conciertos encima del colchón mientras quién está con ella sonríe. Le encantaría vivir de lo que escriba. Claro, ella tiene 20 años.

Y Rubén es de esos chicos prácticos que buscan una casa con jardín, una mujer que le haga reír, que le haga la comida y le sonría en todo momento; alguien con el que vivir sea simple, que tenga un trabajo  menos bohemio, que quiera tener hijos ya. Él tiene 28, es normal que quiera algo más a largo plazo que ella.

Entonces piensa en lo que le dijo Patry.
-Busca un lugar en el que haya gente con la que te vayas a llevar bien y ¡lánzate!
Ella quiere ir a la universidad, tener amigos de allí, que tenga unos objetivos como los ella. Quiere divertirse fuera, quiere salir del cascarón que es su casa.
Y él querría alguien con el que estar siempre, con el que compartir cosas. Y él no tendría colegas en Madrid, se quedaría solo en casa mientras ella está de marcha con los demás.
Y Lara cada vez le menos posibilidades a cumplir lo que ha prometido.

sábado, 3 de diciembre de 2011

Capítulo 6.

Lara se levanta, ayer se acostó muy pronto y Rubén, como siempre, le deja esas despedidas que tanto le gusta encontrarse por la mañana:
[2/dic/2011 1:41]
"weno cari
que descanses
me voy yo tambien a dormir
que sepas que te quiero y mme gustaria compartir mi vida contigo
y que nos hicieramos felices mutuamente
un besito
te quiero cielo"

Se viste pronto pero no le da tiempo a desayunar, solo a preparar un cacao. Mientras se lo toma piensa en todo lo que ha ocurrido en dos días.
El miércoles se había teñido de pelirroja, metiéndole prisa a su madre porque al día siguiente había quedado con Pablo. Y su madre la metió prisa ella para llegar a clase, a unas clases de bachiller nocturno a las que no llegó. Directamente se fue a ver a Karla, a saber de ella y de su vida. Total, son amigas ¿no?
Karla la abrió la puerta en pijama. Con su cuerpo delgado y ágil, de 1'70 de estatura, vestido con el pijama; la cara de Karla sonrió y la invitó a pasar. Karla no es extremadamente guapa, tiene los ojos normales y negros, un pelo a capas y oscuro, la nariz no es grande ni pequeña sino con un puente aguileño; pero los labios de Karla esla envidia de todos, jugosos, rosas... Bastante besables. 
Se hicieron las mil y una confidencias que se hacen las amigas cuando se apoyan y están en intimidad. Tras mucho tiempo hablando, apareció la compañera de curro y de piso de Karla, Naerovi.
Naerovi es rubia platino, de bote por supuesto, con el pelo formándole tirabuzones; piel clara, ojos claros sin un color definido, nariz angulosa y boca de labios finos pero golosos. También de cuerpo delgado con turgentes pechos y caderas anchas.
Al entrar por la puerta y verla allí, el carácter de Naerovi cambió casi drásticamente. Lara se sentía un poco incómoda. Cuando Nae se fue a dormir a la habitación, Karla empezó a contarle cosas bastante raras.

El jueves estaba nerviosa, quedaría con Pablo y eso era una ocasión especial y, por lo tanto, requería un peinado digno de ello. La noche anterior, después de contarle a Karla todas las novedades, le contó que al día siguiente había quedado con Pablo.
-¡Pues, venga! ¡¿A qué esperas?! -dijo eufórica. -Vamos al baño y te aliso el pelo.
A Lara le encanta que su amiga tocase su pelo, lo moldease y la maquille. Siempre acaba preciosa cuando deja a su amiga que la maquee.
Entonces, de vuelta a casa en el autobús, piensa en Kos.
«Quizá las cosas hubieran sido distintas si hubiéramos seguido en contacto.» Lara le hubiera encantado seguir en contacto con él, pero Kos no se había esforzado por conseguirlo. Ella le mandaba sms y le escribía cosas. Pero, desde que había vuelto al curro, sentía que Kos la había abandonado. Y ahora con lo de Rubén, pensaba que nunca más volvería a verle, a parte de en el juego.
Entonces se centró en Pablo, esperaba, por lo menos, caerle bien.
Después de inglés, donde tuvo que abandonar a Luis, subió corriendo a ducharse y prepararse, ella le pidió una hora y él le dijo que no podía. Así que, lo de quedar, quedó en nada. La verdad es que a ella no le importaba, quizá tenía razón y el Destino había decidido que no se encontraran nunca.

Hoy viernes, las clases se le hacen pesadas y bochornosas. Piensa en el examen que le espera a quinta hora.
"Ya estoy vieja para exámenes." y solo acaban de comenzar.
Recuerda que se ha olvidado la pastilla del mediodía en casa. Decide ir a por ella a su casa, pensaba que 1 y 20 minutos le daría tiempo, pero, como siempre le ocurre, el transporte se niega a coincidir con ella.
Llega media hora tarde al examen. Entra en clase corriendo y da una excusa sobre su abuela.
Jose le da su examen y ella lo termina incluso pronto. Jose se queda petrificado y sorprendido de la rapidez de hacer su examen.
Luego, cuando termina, se va a casa de su abuela a comer. Arroz caldoso con conejo. Comida de abuela.
Ha intentado que Isma vaya, pero el curro es el que manda, así que Isma no puede ir.
-Le he dicho a Isma que viniera pero me ha dicho que no porque tenía mucho trabajo.
-Oh, vaya. -al aparecer, mi abuela contaba con él para comer. -Bueno, que se venga un festivo y le hago un banquete para su cumple.
Mi abuela se ha acordado del cumple de Isma y eso hace darme cuenta que no he comprado nada para su cumple. No ha podido escaquearse conmigo una tarde para comprarle sus libros.
«No sé. Quizá en uno de los festivos pueda decirle de mirar. Pero las tiendas no abren.» tendrá que obligarle a quedar este sábado.
La tarde es tranquila, intentando dormir la siesta, escuchando a su abuela contarla cosas... Debería empezar con la biografía de su abuela, se la prometió cuando estuvo en Semana Santa.
-Abuela.
-¿Qué?
-¿Cuándo quieres que empiece?
-¿Con qué? -su abuela se voltea curiosa y sorprendida.
-Con lo de tu biografía.
-El día en que traigas papel y boli. -sonríe. Lara mira a su abuela y piensa que ella no estará siempre en esa mecedora para contarle las historias que tanto la fascinan.

martes, 29 de noviembre de 2011

Capítulo 5.

Hoy se ha levantado con ganas de besar a alguien, con ganas de tontear.
-¡Lara, -dice su madre. -son las 7:15!
-Lara abre un ojo y vuelve a cerrarlo, acomodándose dentro del edredón caliente. Pero, la culpabilidad de que quizá llegue tarde sin poder permitirse muchas más horas. Se levanta más cansada que el día anterior.
Abre el cajón y saca una braga normal, con cinturilla y azul, de esas que usan las viejas y las gordas. Y es que ella lo está, como siempre se mira en el espejo de cuerpo entero, mira la de grasa que hay en sus piernas, que se acumula en el vientre. Se ha acostumbrado a ella pero mantiene una relación de amor-odio con su cuerpo.
Se pone los vaqueros y la camiseta negra de manga larga.
Desayuna pero solo a la mitad para poder llegar al autobús.
Además de que debe seguir lo que le dijo el dentista.

Corre pero el autobús ya se ha escapado. Espera al siguiente.
Da un par de toques a Rubén, sin saber por qué. Solo tiene un poco de ganas de él, de escucharle; se mal acostumbra y lo sabe.

Las clases pasan aburridas y con pocas ganas de hacerlas, solo tiene ganas de estar mirando TQDs y ADVs. Y comenta uno de ellos, en el que una chica se queja de la novia de su hermano, ella es Panda.

Panda, es una adolescente que hoy cumple 16 años. Muy guapa, de cara redondita y hoyuelo en la barbilla, de ojos alegres y marrones.

Después va a casa, come sopa de sobre y una chirimoya. Debería adelgazar. Hoy, mientras venía en el autobús ha visto una tienda, con ropa preciosa y que le encantaría ponerse pero ella no cabe en esa ropa; tiene unos muslos enormes, una tripa que sobresale mucho y poco pecho. Se coge la papada y se odia a sí misma por estar gorda.

Luego corre a Inglés, donde no hay profesora. Hace el examen sola, en una clase apartada; y se siente empequeñecer y que todo la supera. El inglés que se le da tan bien ahora la traiciona y no la deja hacer los exámenes; es una permanente tortura que la agobia.
Y cuando termina, escribe en la pizarra sobre como se siente en inglés.
La caja torácica la comprime el pecho y los pulmones, se siente en una jaula; aprisionada y confusa, siente que necesita aliviarse:
-Necesitaría un tiro en la cabeza. -dice mientras sendas lágrimas recorren sus mejillas.

No se concentra, no se relaja, piensa en todo aquello que va a perder. Quiere aprobar ese maldito examen, quiere darle con la nota a su profesora de la academia, quiere poder ir a aquella "escuela" de arte, donde hay un pintor guapo, moreno de ojos claros.

Llega a casa, hoy no tiene clase. Es huelga de profesores por una educación mejor, pero ya no habrá educación  pública. Rajoy se la cargará. Entonces piensa en las locuras que le dijo a su abuela. Quiere hacerlas realidad.
Se imagina con una ametralladora, y con todos los inútiles de lo diputados y ministros delante, ella empuñando el arma y disparando, creando un gobierno mejor.

Pero lo que más la jode hoy, es que es el blanco de todas las broncas.
Bronca con su padre.
Bronca con su madre.
Y su hermana riéndose por lo bajinis.
Y cada vez más ganas de irse de casa.

lunes, 28 de noviembre de 2011

Capítulo 4.

Se levanta pronto, el despertador suena a las 9:00. Lo apaga y sigue durmiendo.

De pronto, oye un susurro. La voz de su padre la apremia a levantarse.
-Son las 11, Lara. ¡Despierta!
-¡¿Las 11?! -se alarma, piensa que no va a llegar a clase. Mira el reloj. Son las 10:38. Mira a su padre de reojo. Decide meterse en la ducha, justo cuando Rubén la ha saludado en el MSN. La verdad, no puede dejar de pensar en todo lo que ocurrió ayer, no puede dejar de dar vueltas a todo lo que tiene que ver con Rubén y con ella.
Se mete en la ducha, su cabeza se despeja contra más fría está, más despejada se siente. Sale del baño, se enrolla en la toalla azul cielo y se pone toalla verde en la cabeza.
La ducha la llena de energía, sonríe, le espera una buena mañana.

Se viste mientras revisa su MSN. Un saludo más que cordial de Isma, una rayada por parte de Rubén. Todavía sigue con lo mismo, la enfada, la raya y la cabrea.
Sigue hablando con Isma, se va a desayunar. Mientras lee cómo Dexter y Emma está teniendo una quedada horrorosa, como Emma se cabrea y huye de él.

Sube al autobús, da un par de toques a Rubén. Este la llama, sonríe al otro lado del auricular porque le encanta su voz. Hablan de todo un poco, pero no le habla del deseo de su abuela. Quizá lo haya leído en el blog, quizá lo ignore o se haga el loco. La verdad, ella le gustaría hacer esas mismas preguntas a Isma pero ya sabe las respuestas.
Pero aún así, quiere saber más. Quiere saber por qué no la quiere.
Sigue hablando con Rubén, llega a su parada, se baja.

Plaza de Castilla.
Luegar donde un conglomerado de edificios de oficinas, esconden a la pequeña escuela detrás de las torres Quio. Hace frío en la mayoría de las aulas. Espera fuera con Emilio, un compañero de clase simpático y, se le antoja, atractivo.
Habla por el MSN con Isma y Rubén. Isma le habla sobre regalos de Navidad y cumpleaños, ella sobre tonterías varias que se le pasan por la cabeza. Él dice que el único regalo que busca es ser feliz, ella piensa que quiere ser feliz con él.
Por otro lado, Rubén habla con te quieros y tengo ganas de ti. Ella siempre responde con lo mismo. «Lara, en qué líos te metes.» piensa para sí.

Es hora de irse a casa, se encuentra su padre y discuten sobre si es mejor ir por allí o por acá. Sobre fechas de exámenes, sobre dinero... Todo, o casi todo, puede hablarlo con su padre. Se bajan, cogen otro autobús. Y siguen con sus charlas.

Llegan a casa juntos y su madre, Maribel, espera con una olla llena de acelgas y una sartén con filetes. Siempre la misma comida, la que nunca falla.
-Lara, recuerda que hoy tienes dentista. -llevaba un par de días en que tenía las encías inflamadas y doloridas, sin embargo, no le importaba que le dolieran sino la enfermedad que podría acarrear.

Son las 17:38. Coge su abrigo y baja al dentista. Llega y un chico muy guapo le abre la puerta. Como buena chica de veinte años, pregunta a la otra ayudante del dentista.
-Es Pablo, el hijo de Jesús.
-¿Has visto que ojazos grises tiene? -dice ella recalcando que le encantan.
Cuando sale del dentista, después de una limpieza dolorosa y asquerosa, Pablo la sonríe y ella ya no siente nada más allá de esos ojos grises. Charlan un rato. Se llevan solo 4 años, se lo ha comentado a Rosa, la ayudante. El próximo lunes, a las 11, volverá a ver esos ojos grises que la han atrapado.

Sube a casa y le plantea todo lo que ha pasado en el dentista, evitando hablar sobre el nuevo recepcionista de la Clínica Monge y sus ojos grises luna.
Luego se pone a ver la trilogía de Blade, se queda a mediados de la segunda película. Es hora de ir al Giner de los Ríos, pero no le apetece ir.
Isma lleva rato picándola, haciendo que se le suban los calores y le dé un calentón.
-Lara, -comienza su hermana. -tienes que ir a clase.
-Sí, ya voy. -coge la mochila, y el abrigo pero no va a clase.

En el ordenador se queda la conversación:
Isma dijo: entonces te vienes?
Lara dijo: claro
Lara dijo: tu esperame y no huyas
Isma dijo: vale
Isma dijo: te espero aqui
Ella lo suspende y vuela hacia el metro, pero tiene un autobús que la deja más cerca; además, con las malditas botas de pelo, le duelen los pies.
Por el camino una nueva historia se crea en su mente.
"Podría escribir una historia de vampiros. La protagonista podría ser una recién convertida y que no es capaz de frenar su sed de sangre." Incluso empieza a crear una ilusión entorno a esa historia.

Por fin, llega al curro de Isma, donde él la espera con beneplácito, sonriendo. Se meten en la sala de reuniones y allí lo hacen. Lara se sienta encima de la mesa e Isma le hace una comida de clítoris que la lleva a estallar del placer. Luego se coloca para que Isma la penetre, llega hasta el fondo y eso hace que los dos tengan más placer. Él se corre enseguida y ella va en busca del papel. No pueden dejar constancia de que allí ha habido sexo.

Luego hablan como amigos de toda la vida.
"Parecemos Dexter y Emma."
-Bueno, me puedo llevar unos folios ¿a qué sí? -le pone pucheros y cara de pena. Él le trae un paquete nuevo y se lo da. -Gracias. Eres muy majo. -sonríe.
Se van, charlando como si no hubiera pasado nada. Pero ella está feliz. Ver a Isma es como un subidón de felicidad, mejor que las drogas. La hace sonreír y pensar que quizá no será para tanto.
Vuelve a casa, con una sonrisa y un paquete de folios en la cartera. Cena salchichas y termina de ver Blade II.
Rubén la habla e Isma la ha hablado, preguntando cosas íntimas pero que se cuentan como si todavía fuesen esa pareja que fueron.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Capítulo 3.

Después de cenar ayer, entró en el salón, donde su padre veía la tele. Tenía puesto el porno.

"Joder, otra vez no." piensa en voz baja. Habían tenido toda la tarde para hacer cosas de ese estilo, además ¿qué le ve al porno? A ella no le ponen la mayoría de esas películas, en realidad, ya nada le pone. Solo tiene pequeños calentones de vez en cuando. ¿Dónde se ha metido la ninfómana?

Habló con Rubén pero todo fueron lágrimas. Lágrimas que la hacen enfurecerse y sentir que le odia, aunque no es verdad, son pequeñas furias hacia él porque odia que sea un llorón.


Hoy se levanta cansada. Son las 13:38 de la tarde, hoy ha dormido hasta tarde pero ¿qué importa? Para eso son los findes, se conecta al Aion mientras intenta relajarse. Pensar que entrará y se reirá y así es. Ríe, disfruta y se mete con la mayoría de los chicos con los que juega. Aunque muchas veces se regaña a símisma por ser tan chabacana, por no ser tan mordaz y femenina como la brigader, Darky.
Quizá, como siempre ha pensado,nació para ser un hombre y no una mujer; piensa que ligaría más si fuese capaz de decir cosas menos bastas pero ella es así. También se preocupa por unos y por otros, es maternal. Pero de eso nadie comenta, nadie le dice que eso está bien o está mal.
Odia que Darky se lleve todas las flores y las ofrendas y ella quede en un segundo plano, pero ¿qué más da?
Solo es un estúpido juego con el que disfrutar, dejarse llevar y sentir que forma parte de algo, decir que tiene amigos cuando no es así.
También piensa que si se presenta tal como es, la gente no la querría. Ella está para representar el papel de chica basta y bisexual. Y es verdad que le gustan las chicas, y es verdad que los chicos le encantan pero... siente que siempre está representando un papel.




Y bromas, pullas inocentes y demás formas de sacar una carcajada a alguien se convierten en su única forma de ser feliz. Y sigue representando su papel, no puede ser natural. No puede demostrar que es frágil, que solo espera que alguien la diga que ella no es así, que en realidad lleva esa máscara. Pero nadie se da cuenta.

Y otra carcajada, ella siempre en el meollo de todo.

¿Qué pasaría si fuese ella misma? Que nadie se atrevería a dirigirla la palabra, ni a reírse con/de ella ni siquiera a dirigirle un saludo. No puede mostrarse como es porque es débil, frágil e idiota; sumamente idiota. Da igual cuantos libros haya leído de Psiquiatría, de Zoología, Biología, Psicología. Con otra gente se siente idiota y fuera de lugar. Como si ella sobrase siempre.




Pasan las horas de esa manera. Y piensa en muchas cosas:

"Como lo feliz que parece Diens. En que debería hablar con él, terminar por decirle todo."

ó

"¡Qué bien! Crimen me hace reír y me protege." Lara quiere un chico así, que la haga reír y la proteja, Crimen le encanta, es un chico majo e increíblemente loco.

ó

"Quiero hablar con Bob." pero Bob no está allí y ella no tiene con quién ser más femenina y frágil.




De pronto siente envidia de no ser como Iryss, no ser tan guapa ni tan esbelta ni estar tan buena como ella. Su genética se queda con las grasas, los atracones. «Quizá debería volver a vomitar.» La gente piensa que eso no es bueno pero es lo que se fomenta, a cada rato, en la televisión, en Internet; todo elemento visual tiene a chicas delgadas, sanas, buenísimas y que todos los hombres quieren.




Termina harta de sus pensamientos, del juego y de sentirse totalmente fuera de lugar, de sentir esa envidia por alguien que no conoce.

Total, ¿qué más da? Nunca nadie se dará cuenta de lo que vale si sigue con esa máscara llena de fisuras puesta. Quizá Lara debería quitársela, ya casi lo ha conseguido; ¿no lo ha hecho ya con Bob, con Kos y con Jorge?

¿Qué pasaría por hacerlo con los demás?

Se sienta a escribir un rato. Su libro de zombis, otro que se quedará en el MegaUpload y nadie mirará; ella no es buena escritora pero se esfuerza o, por lo menos, lo intenta.

Decide que es hora en que debería dedicarlo a hablar con Pablo, con Isma y con Rubén.

Con Isma se intercambia el saludo de rigor.

Con Pablo un hola y poco más.

Con Rubén, otra charla sobre lo mismo. Si Lara esperaría por él, ella no lo sabe. Quizá sí, quizá no. Pero no sabe qué decirle... No quiere hacerle daño pero tampoco faltar a la verdad, así que dice lo que piensa, reflexiona y cree. Y todo queda ahí.

sábado, 26 de noviembre de 2011

Capítulo 2.

Se levantó con el ruido de aquel aspirador tan viejo que sus padres usan para limpiar. Y lo primero que ve es la despedida de la noche anterior.
Rubén se ha explayado como siempre. Y se le dibuja una sonrisa en la cara; después de que ayer estuviera llorando durante la llamada.
La verdad es que se pregunta qué es lo que hace sentirse tan contenta. Entonces se levanta y piensa en lo que suele pasar por las noches: ella le promete y le da unas esperanzas que no cree que pueda cumplir; sería lo mejor enamorarse de él o cortarle las alas.
Pero reflexiona, conoce demasiados chicos que le gustan:
+Pablo: el periodista de adictiva literatura. Un escritor, igual que ella; pero que no sabe por qué sus obras se le hacen adictivas, siempre tiene ganas de más y él tampoco es que no le llame la atención. No es guapísimo pero tiene una cosa que ella encuentra fascinante. Quizá algún día sepa qué es.
+Kos: Aquel mecánico al que conoció a través del Aion. Después de hablar y hablar con él un mes entero, se siente unida a él. Y la promesa. Y no para de pensar en ello, en qué hubiera pasado si no hubiera mentido.
+Jorge: Otro chico que conoció en el Aion. Al cual parece que se ha apegado sin necesidad alguna. No sabe, no puede contestar; quizá porque sea inalcanzable; quizá le da rabia que alguien le haga daño.
+Bob: Venga, os va a sorprender. Otro chico con el que empezó a tontear, tonterías que le hacían gracia. Y conocido, por supuesto, en el Aion. Ahora son amigos.

Pero hoy no vamos a hablar de chicos, ha decidido, e intenta cumplirlo, no tontear más de la cuenta. Quizá debería hacerse lesbiana, las chicas son majas y simpáticas, y las hay muy superficiales pero no son tíos que te follan y desaparecen. Tiene un par de experiencias de ese tipo y no quiere que se repita.

Tose un par de veces, está acatarrada y mira la pantalla, a la de gente que conoce pero que no sale con ellos. Pero hoy tendrá una tarde con sus chicas, Mari y Raquel. Quisiera que volviera a ser como antes, volver a salir y quedar... Pero cada una tiene su vida. Piensa que para tener 20 años, no tiene la vida que tanto deseaba: no sale, no va a discotecas, ni tiene fotos con sus amigas; no como sus "contactos" de Tuenti que tienen miles de fotos de fiesta. Sin embargo, aparta de la cabeza esa idea.

Come sopa de fideos, y una masa que es un nuevo experimento de su madre, otra comida que se quedará en el tintero.
Vuelve al Aion, diciendo que se tiene que duchar aunque, en realidad, no le apetece nada cerrarlo, no le apetece ir con sus amigas...
Pero, menos mal que el router de Movistar la devuelve a la realidad, debe ir.

Llega pronto, incluso para ella es novedad. Llama al piso de Mari y esta la abre, le da su regalo de Navidad/Reyes/Cumpleaños; ella debería haber llevado aquel retrato, pero necesita más ajustes, no puede entregarlo como está. Raquel llega tarde, otra novedad.
Se divierten con la Wii, con los juegos de bailar, y luego, cuando están cansadas de tanto movimiento, al Buzz. Es una tarde llena de risas, de piques amistosos y cosas suyas.

Luego vuelve a casa, y por el camino piensa que todos los findes deberían ser así, quizá así no sentiría que no tiene amigas. Y, ahora que Mari le ha dado un regalo, ya no cree que está sola. Siempre que se sienta sola mirará al espejo y no pensará así.
Entonces se acuerda de los mensajes de las llamadas perdidas de Rubén, son las 12:47. Ya no podría llamarla, quizá sea mejor así. Y se pone a pensar en Kos y en Pablo. No sabe bien por qué pero piensa en ellos.

Luego se mete en su blog y escribe, la reciben mil y una personas, entre ellas, Raquel. Le encantaría decirla que quiere que todo vuelva como antes de empezar con Isma, que le encantaría sacar el curso con ella; ayudarla en sus dudas; sin embargo, le enseña la foto del regalo de Mari y se lo calla.
También la recibe Pablo, y otra sonrisa se forma en su boca, quizá podrían no tener nada serio, solo tonteo y un royo, pero piensa estropearía todo; Pablo se cansaría o que se enamorase de ella, ¿qué haría con Rubén?
Hoy, si le ve, sonreirá por verle sonreír porque le quiere pero no de la misma manera, le tiene cariño. Y, de todo lo que hablan por la noche, también hay verdades:
Es verdad que le gustan sus manos, que sus ojos no son tan pequeños, que su sonrisa es bonita y que le gusta ver cómo se sonroja, le gusta como es su voz y que le diga cosas dulces mientras hablan; tiene miedo de hacerle daño, y no solo a él, sino a Pablo también. Porque es una chica de veinte años que no sabe lo que quiere, si no sólo quiere escoger de lo que le ofrecen.

viernes, 25 de noviembre de 2011

Capítulo 1.

Ella va caminando por la calle. Habla sola porque no le queda otra.
Espera al autobús leyendo ese libro que le costó solo 10€.
"One Day" de David Nicholls, en donde Dexter y Emma toman vida; sigue leyendo. Muy de vez en cuando levanta la vista unos segundos para ver si viene su autobús y la baja cuando observa que no viene. Cuando llega a su parada, una de las últimas en las que ya casi no hay gente dentro del transporte, cierra el libro y Emma y Dexter se quedan en pausa, esperando a que Lara vuelva a abrir el libro y siga soñando.
-¿Cómo quieren mis padres que tenga amigos? -es una pregunta lanzada al aire, mientras nadie la mira. Y se pone a hacer un monólogo a alta voz, dando razones y buscando explicación a no salir por las tardes, a no tener amigos con quién reírse.
De pronto suena Rihanna, We found love, y el texto del comienzo se le hace doloroso. Y entre las lágrimas que se forman en sus ojos, piensa en Isma.

-¿Vas a volver con Isma? -a su abuela, Conchi, parece que se le ha atragantado esa pregunta dentro de su boca. Siempre está preguntando, siempre que va, allí está la cuestión. Flotando en el aire, en el ambiente, en la mente de su abuela.
-Abuela, creo que eso ya no tiene remedio. No vamos a volver. -su voz se entrecorta, el tono se hace doloroso, se quiebra. -Aunque me ha dicho que algún día vendrá conmigo a verte.
-Entonces, le preguntaré: ¿Qué os pasó? ¿Por qué mi nieta sigue sufriendo por no tenerte a su lado? -y mi abuela sonríe: -Él era un buen chico, y tú le querías, le quieres, mucho.
-Ya pero, abuela, ya nada puede ser como antes. -retiene las lágrimas en sus ojos.

Llega a casa, esperando estar sola, poder desahogarse llorando en su habitación. Hacerse unas palomitas y ver una película.
Sin embargo, ahí están sus padres, su hermana y unos amigos de sus padres: Tati, Iván y Borja, su hijo. Saluda sin demasiada consideración, intenta poner buena cara pero, en cuanto puede, huye a su habitación. En principio se pone al Aion con la esperanza de que eso la haga sentirse menos sola.
Y entonces le saluda Kos.
Y el corazón le da un vuelco, quería tener la excusa de que no estaba para no preguntar aquella estupidez que solo le hará mal. Se esconde entre tonterías sin sentido, pero la duda perdurará.
"¿Te sigo gustando?"
La pregunta ronda su cabeza, pero cree que tiene algo claro, que teniendo a Rubén, Kos se apartará. Solo si entonces hubiera dicho una verdad, una absoluta y verdadera verdad...

-¿Hubieras esperado si te hubiera dicho de ir? -preguntó él.
Ella lo pensó durante un minuto, ¿le decía la verdad o mentiría para quedar bien?
-No. -respondió y mintió. -Me gusta cómo es.
Y pensaba que la culpa era de él, por no decir nada, por callarse cuando ella había hecho lo imposible por ligarse a aquel chico.

Ya la verdad es que nada tenía marcha atrás. Su vida era decisiones erradas por doquier. Y piensa en aquella promesa que nunca jamás se cumplirá, en lo que le duele que la mientan.
Al final acaba haciendo su pregunta, enmascarada en forma de respuesta rara; él no contesta. No sabe si es porque ahora ella tiene a otro o porque se le ha pasado o, quizá, nunca le gustó ella. Y la promesa se repite en su mente: «El día en que baje, quiero hacerte el amor. Pero después no quiero que te vayas, quiero que duermas junto a mí, ver la televisión y hacer más cosas.»
Pero la promesa no se cumplirá porque eso es así. Nunca verá a Kos en persona, nunca harán lo que él le prometió a ella y ella seguirá hundiéndose en una miseria que es suya.
Y su último pensamiento antes de dejar este capítulo acabado:
"Mi vida es una ruleta rusa que gira, me gustaría quedarme solo con las cosas buenas pero no puedo quedarme con las cosas buenas, porque no las vivo."

jueves, 17 de noviembre de 2011

Un Mes y Un Día.

Por si pensabas que me había olvidado...
No me he olvidado.
Hace un mes, un día como ayer hiciste que mi mundo cambiase un poquito más. A veces a bien, otras veces a mal, pero es que las cosas positivas superan a las negativas. Quizá un día me cambies un poco más o quizá un día cambie más la situación. Pero creo que seguiré pensando y diciendo que las cosas que me gustan de ti:
Me gustan tus manos, tan delicadas y protectoras, manos con ganas de abrazar, de acariciar, de amar.
Me gustan tus labios, tengo ganas de besarlos, de comérmelos a trozos pequeñitos.
Me gusta tu voz, bueno, no me gusta, es algo que me encanta, algo que me hizo quererte conocer un poco más. Le debes mucho a tu voz, como esta actualización, como que me fijase en ti y el conocerme.
Me gusta tu cara al sonrojarse, me resultas muy inocente cuando te sonrojas de esa manera.
Y, lo que más me gusta de despertarme, encontrarme con tu buenas noches cuando yo me he quedado dormida mientras hablábamos.

Y ahora lo que no me gusta de ti:
Tu continúa manía de estar diciéndome que me quieres.
Que me digas cosas melosas. Mentira. Me gusta que me digas cosas melosas.
Odio que el no tenerte cerca para demostrar más que me gustas.
No me gusta nada que repitas a cada minuto que te gustaría estar aquí conmigo, odio la distancia que nos separa y odio que la tengas más en cuenta que a nada.
Odio que no te pongas celoso, quizá es lo que más odie.

Pero bueno, esta es una entrada para decirte que lo voy a intentar, intentar querer más a tus cosas malas, y odiar un poquito más, tus cosas buenas.

Y repetir esa frase que se ha puesto de moda en tus labios:

"Es que las cosas positivas que me das superan con creces a las malas. Y mientras sea así, te querré."


Ahora, como si te viera, te pondrás de color rojo cual tomate y llorarás, porque eres un llorón. :)

martes, 15 de noviembre de 2011

Tus Intenciones.

Gracias, me he dado cuenta de a qué ibas.
No hace falta que busques excusas que saben a mentiras,
ni vas moldear esas mentiras con un amor que no existe tras las cortinas.

Vendrás,
descargarás,
y otra vez, volveré a las sombras.

Déjame en paz,
no me hables más, 
huye allá donde no pueda verte jamás.

No me engañas
con amor de esquinas
ni tus palabras bonitas.

domingo, 13 de noviembre de 2011

Una Herida.

Si os digo una cosa no os lo creeréis:
No soy especial, ni increíble ni mágica. Solo soy una chica normal con una herida atractiva, atractivamente dolorosa y atrayente, que gusta mirar y tocar; pero no es una herida física, es una herida en el alma.
Es una herida creada por la falta de cariño y de amor, eso hace que se me vea como una chica-cachorro, me adoptan y tendrán una persona fiel; la verdad es que es así. Soy fiel y tonta por naturaleza, da igual cuántas veces me hayan golpeado, insultado o pasarlo mal; siempre estaré ahí.
Lo bueno: que soy fiel pero rebelde al mismo tiempo, además de sincera, lo que causa que acabe teniendo discusiones con Karla y más gente solo por las ganas de soltarles la verdad a la cara.
Pero no solo soy sincera, fiel, tonta y rebelde; también soy suicida y triste, solo tengo ganas de morirme, morirme a todas horas. He vuelto a mi estado original.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Un gato.

Estoy pensando en plantearle a mi madre el comprarme o adoptar un gato.
El problema son sus uñas y las cortinas.
También tengo el problema de que al tener una cobaya, el gato se la quiera comer.

¿Cómo pensáis que debería decírselo a mi madre?

miércoles, 9 de noviembre de 2011

No creo poder amarle.

¿Por qué sigues aquí, instalado en este corazón que no puede latir por nadie más?
Siento no poder amar a nadie más.
Rubén, lo siento, pero no creo poder amarte; te he cogido cariño y me encantaría poder ayudarte a ser feliz pero él sigue instalado aquí. Quisiera poder sentir una décima parte de lo que tú sientes. Siento que no me gustes como yo a ti. No quiero hacerte daño pero... creo que no puedo volver a amar, creo que me he estancado y que él es el definitivo; siento darte unas esperanzas que no te hacen bien, siento decirte cosas que te harán daño.
Siento haber dicho un te quiero sin pensar.

Luna.

Ayer, estuve hablando con la Luna. El cigarrillo que había entre mis dedos se consumía lentamente, y con cada calada, más miraba la Luna Llena.
-Deja de mirarme así, me desgastarás y luego nada iluminará la noche.
-Que importante te crees, ¿no?
-Hombre, si me miras así ¿cómo quieres que me sienta?
-Pues yo ya soy más importante que tú.
-¿Ah, sí?
-Sí. Para alguien especial.
-Alguien que vive en la Luna de Valencia.
-Mentira, vive y piensa en mí, su Luna.
-Te llamará Luna por la cara redonda que tienes. -se río de mí.
-Pero yo ilumino más su vida que tú.

sábado, 5 de noviembre de 2011

Amor y Tiempo.

Puede que el tiempo mate al amor,
pero seguiré siendo tan romántica
como el primer día;
¿por qué no puedo cambiar?

jueves, 3 de noviembre de 2011

Amor y Tiempo.

El tiempo destruye el amor.
El amor no dura con el tiempo.
Después de ese tiempo vuelve otro amor,
y ese amor, con el tiempo, se volverá a ir.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Mis canciones.

Siempre podrás saber como me encuentro dependiendo de lo que cante, aquí tienes una lista para guiarte y saber cómo me siento.

Feliz
Fuckin' Perfect de Pink.
Funhouse de Pink.
Raise your glass de Pink.


Soledad
Kuroi Namida de Anna Tsuchiya.
Don't tell me de Avril Lavigne.
Forgotten de Avril Lavigne.
Naked de Avril Lavigne.
Numb de Linkin Park.
Strange de Tokio Hotel ft. Kerli.
Rose de Anna Tsuchiya.
I'll be your home de Rin Oikawa.


Guerrera
Trouble de Pink.
U + Ur hand de Pink.
She's a rebel de Green Day.


Melancólica
I'm with you de Avril Lavigne.
Wake me up when September ends de Green Day.


Pensando en ti
Lips of an angel de Hinder.
Brennende Liebe de Oomph!.
Decode de Paramore.
Whispers in the dark de Skillet.
Until the day I die de Story of the Year.
Stand by me de Anna Tsuchiya.
Tu pelo de LODVG.
A Dream Worth Keeping de Sheena Easton.
Kiss me de Sixpence none the richer.
Corazón, boli y papel de Porta.
Querida alma gemela de Porta.




Subiendo la moral
Sandmann de Oomph!.
Ignorance de Paramore.
Misery Business de Paramore.
Pressure de Paramore.
Sonne de Rammstein.
Mein Teil de Rammstein.
Feuer Frei de Rammstein.
Das Modell de Rammstein.
Resident Evil Main Theme.
Seizure Of Power.
Inner Universe de Origa.
Do it like a dude de Jessie J.
S&M de Rihanna.


Baja de ánimos
Just like a pill de Pink.
Pain de Three Days Grace.
Here without you de Three Doors Down.
Russian Roulette de Rihanna.
Solo un cuento de Angy.
Tiritas de alambre de H0lynaight.
Lo intento de H0lynight.
No eres tú de Yesh ft. Porta.
Lose Yourself de Eminem.
Love the way you lie de Eminem ft. Rihanna.


De risas
Te quiero puta de Rammstein.
Pussy de Rammstein.
Teleamigos de Día Sexto.
Ven fóllame de Día Sexto.

martes, 1 de noviembre de 2011

Hay que follarse a las mentes.

Video filósofo.

Este monólogo viene de una película argentina que está en mi lista de películas pendientes de ver pero creo que es algo que me hace gracia y más en nuestra época de todo es imagen. La gente ya no se folla a una mente porque no les seduce, les seduce aquellos/as que más "buenos" están y no se dan cuenta que una mente abierta y que funciona es mejor que una mente que no muestra interés en nada más que en lucir vestidos cortos, enseñar su ropa interior.
Creo que hay que follarse a una mente que seduce y no a un cuerpo que es solo cuerpo y en el que no hay mente.
¿Creéis que es mejor follarse a una mente o a un cuerpo?

sábado, 29 de octubre de 2011

No hay tiempo.

Nunca hay tiempo para mucho más, siempre hay tiempo para los demás.
¿Sabes?
Me estoy replanteando lo que dijo mi abuela, porque voy a sufrir más de lo que ya sufro. No voy a esperarte, no soy Julie. No voy a apoyarme en mi espalda y esperar a que tú aparezcas, con una armadura que no te pertenece y me saques de un agujero que no te importa en absoluto.
¿Sabes por qué estaba cabreada el otro día, aparte de lo de lo TeQuieros y la distancia?
Te estoy cogiendo rabia, no lo sé, pero te la cojo. Y no es que me duela el que digas esos te quieros que no llegarán a mis oídos, ni me los dirás mirándome a los ojos; te cojo esa rabia porque tú tienes una vida fuera de mí, porque soy el perrito fiel que te espera por las noches, da igual cuanto tardes, a qué hora llegues.
Odio tener esa mierda de obsesión de estar encima del hombre que me gusta y no es por posesión, es que sencillamente soy así.
Fiel hasta el final, apoyada en la espalda, fumándome un cigarrillo que no me relaja.
No quiero seguir siendo ese perrillo, no quiero pensar que me quieres; porque es una mentira más grande que toda África.

jueves, 27 de octubre de 2011

RAP reinvidicativo

Música de fondo.

Últimamente me ha dado por el RAP más responsable e reinvidicativo, como el de El Chojin, que habla sobre poder cambiar la mierda de sociedad en la que vivimos. Nos dan ideas que podríamos hacer para cambiar todo esto que nos pasa.
Me gusta esa metáfora de El Chojin:

Los problemas son los mismos
todos queremos pan
tiran migajas y se rien viéndonos pelear
yo propongo un juego nuevo,
dejar las migas y asaltar la panadería
que sea difícil no implica que sea imposible
que sea imposible no implica que vaya a rendirme.

¿Por qué no nos unimos y asaltamos la panadería y les quitamos aquello que nos dan a cuentagotas? Muchos no pueden permitirse una casa, ni una cama en la que acostar a sus hijos y ellos nos roban todo lo que le dan gana. Se llevan nuestro dinero y, si van a la cárcel, lo pasan de puta madre, siguen viviendo de nuestro dinero. No gastan nada, y ese dinero no vuelve a aparecer.
Y los bancos son otros ratas que te sacan todo lo que pueden, te sajan y encima debes darles las gracias.

En los barrios se hunden 
mientras que los bancos suben,
NO CUADRA
se hacen ricos, con nuestra pasta.

Debemos cambiar esta sociedad en la que solo unos pocos ganan y viven de los pobres, no como la culpa que echan algunos a mantener a los ancianos que una vez nos dieron su dinero para tú fueras a nacer en aquel hospital. Hay que echar a aquellos políticos que viven de lo que recaudan, España se hunde por lo que ellos cogen.

¿Qué os parece si hacemos lo que deberíamos haber hecho con este totalitarismo disfrazado?
Cambiemos este bipartidismo por un sistema que funcione mejor, cambiemos al Presidente del Gobierno por alguien que sea humilde y no se le suba a la cabeza. Bajemos el salario a los políticos y quitemos su pensión vitalicia, que se lo ganen como hasta ahora, dando conferencias por los que cobran un pico.

¡Están ante la mosca que rompió el cristal a cabezazos!

viernes, 21 de octubre de 2011

21 de Octubre de 2011

Y he vuelto a recordar que nuestra fecha es el 21. Que hoy habríamos salido, nos hubiéramos besado y todavía seguirías a mi lado. Que me enlazarías con tus manos, que me abrazarías con esos brazos que tantos golpes aguantaron y que fueron un escudo para mí. Quiero que estés aquí, me gustaría volver a celebrar algo a tu lado, me gustaría que te dieses cuenta de que te echo de menos.

Y sí, es verdad que Rubén está ahí, pero tengo miedos que nadie sabe, que me guardo en cualquier portal y cualquier esquina.

Tengo ganas de un abrazo, de un beso y de chinchar a alguien, que me saquen una sonrisa y susurrar a los oídos de alguien:
¡Te quiero!, Eres muy especial, Tengo ganas de ti a todas horas, Abrázame y no me sueltes...
Y esto sonará egoísta pero así me siento y no puedo hacer nada al respecto. Pero no sé como llevaré lo de esta distancia que me separa de él, porque una relación sin abrazos, sin caricias, sin ciertas cosas no es nada. Y creo que en eso soy como Oosaki Nana, una relación en la que falta el contacto físico me es imposible de llevar porque creo que el contacto es el que hace que algo nazca, que vaya más allá de algunas fronteras.
Además de que siento que me falta algo para no sentirme tan sola en el mundo, porque la soledad vuelve a estar rondándome otra vez y no se va.

jueves, 20 de octubre de 2011

Sé mío.

Me encantaría que fueras mío durante mucho tiempo porque es que no puedo dejar de sentir ese sentimiento que se suele reconocer cuando tienes mariposas en el estómago, la cabeza embotada y siempre pensando en él, las sonrisas tontas, el que me llames y ya se me dibuje una sonrisa, el tener ganas de estar contigo, el rubor que aflora por los halagos y las tonterías que decimos, el sentir que cada parte de mi cerebro y mi cuerpo estás tú, y cuando echo de menos de tu voz te llamo, porque tu voz se me antoja adictiva y por eso me encanta hablar contigo, me estoy volviendo adicta a ti, cada minuto que pasa me engancho más.
Sé mío, durante todo el tiempo que quieras.

sábado, 15 de octubre de 2011

Stand by me.

Música de fondo.

Si cada una de las personas se diera cuenta de las heridas y marcas dejan, nunca se atreverían a acercarse, ni a rozarme, ni siquiera a mirarme a lo lejos.
Muchas de las heridas nunca cicatrizan, otras se metamorfosean en pequeñas mariposas que revolotean de vez en cuando, otras sencillamente se quedan ahí, sin hacer daño pero sin desaparecer, te acostumbras a su dolor.
Como me pasa con Kos, ya sé que pasa de mí y antes me dolía pero ya no, se ha convertido en una herida que no duele, ni cierra, se queda ahí.
Tengo otra que no cierra y de vez en cuando duele, se llama Isma, a veces sí que duele, desgarra el pecho y grita de dolor.

La herida que tiene mi corazón y no cesa nunca, es la búsqueda de algo que le salve contra una soledad cada vez más absoluta; le da igual pagar un precio desorbitado por ella. Me siento tan sola que ya no me importa nada, solo tener un poco de compañía de vez en cuando, pero cada vez me voy envolviendo en mi capullo que me permite evadirme de la gente porque no me gusta que me vean cuando sufro. Odio que haya gente que me conozca tan bien que sabe cuando sufro solo por decirle una palabra o sentir cómo se me quiebra la voz.

Que alguien se quede a mi lado, no es mucho pedir.

miércoles, 12 de octubre de 2011

Lista de cosas que tienen que ocurrir antes de los 27.

★Comprar una cámara e inmortalizar Madrid.
★Ir a la academia de pintura que se encuentra en Argüelles.
★Visitar la tienda Mon Chocolate. Autobús nº 2.
★Enamorarme por las calles de Madrid.
★Que alguien se enamore de mí paseando por Madrid.
★Enseñar la magia de Madrid.
★Ir a ver el ballet El Lago de los Cisnes en Año Nuevo.
★Escribir un libro y se publique.
★Visitar todos los museos de Madrid.
★Comprar un libro especial en la calle Libreros.
★Escribir una historia para alguien especial ¡¡¡a mano!!!
★Vivir en una zona del Centro.
★Recorrer cada ruta de cada autobús de Madrid. ¡Me quedan unas cuántas!
★Escribir una entrada desde un Starbucks de Plaza España. Significará que me gusta el café.


P.D: Si os preguntáis por qué antes de los 27, es porque dependiendo como me vaya la vida, decidiré si me mataré en cuanto llegue a esa edad.

martes, 11 de octubre de 2011

Un Gobierno Sin Leyes Como En La Jungla

La verdad, empiezo a pensar si la mayoría de los políticos recibieron una educación.
¿Acaso todos pudieron permitirse una universidad privada? ¿Cuánto más vamos a aguantar?
El próximo recorte ¿a qué será?
Nos quitan a nuestros profesores y los pocos que quedan están sobre-explotados, porque les toca dar clases que ni les corresponden. Y, sin embargo, los colegios privados siguen comiéndose unas subvenciones que no bajan sus cifras, deberíamos empezar a pelearnos con nuestros políticos porque ellos no siempre fueron ricos, la mayoría seguro que fueron a colegios públicos y universidades del estilo.

Para mí que deberíamos formar una revolución y devolver a España a un sistema anterior, o cambiar el sistema; una república o un nuevo gobierno, pero siempre bajo la dirección de gente honrada y sincera.

Y en cuanto a la falta económica, podríamos hacer muchos más recortes, como el desmesurado sueldo de Aguirre, que se lo subió porque no tenía para pagar el gas.
Señora Aguirre, existe el calentamiento global y gente que con esos 3000 euros que usted se subió hace poco podría dar de comer a muchas familias que no tienen ni para pagar su casa, ni siquiera un techo. Sea un poco caritativa y deje de gastar nuestros impuestos en sus amigos de los colegios privado, y bájese el sueldo y contrate gente para la educación pública.
Lo mismo digo de esa pedazo de pensión vitalicia para antiguos presidentes del Gobierno que, además de cobrar esa pedazo de pensión, muchos de ellos dan conferencias y cobran un riñón por cada una de ellas.

Debemos recortar el presupuesto de los profesores, de funcionarios y ancianos que han currado durante toda su vida para una pensión de mierda, pero no recortamos el presupuesto para la pensión vitalicia de los ex-presidentes, ni de los colegios privados. Empiezo a pensar, y son pensamientos psicópatas, que deberíamos matar a todos los ex-presidentes y coger toda su fortuna y todo lo que han gastado y devolvérselo al pueblo. Además de crear un partido político, o un Gobierno, que permita estar al mando gente que no va a robar ni a volverse loca por el poder. Gente Humilde debería estar en el poder.

Con respecto a todos aquellos que han robado dinero al Gobierno, empezaría a utilizar las antiguas formas de tortura para sonsacarles dónde lo gastaron o dónde lo dejaron escondido. Estoy harta de ver gente que roba millones al Gobierno y solo acaban en la cárcel, diciendo que no saben dónde está ese dinero.
Sé que existen los derechos humanos, pero también han atentado en nuestra contra, quitándonos recursos para poder comprar mujerzuelas y champán. Y, como podéis comprobar, no lo estoy haciendo anónimamente como hacen mucho, lo digo con una cara y una voz. Y lo gritaría, ¿que me queréis tachar de anarquista y terrorista? Tacharme pero una vez, en un momento de vuestras vidas, también lo pensasteis.

viernes, 7 de octubre de 2011

Compañía.

Últimamente solo hago que pensar en que necesito compañía. Me siento sola.
Tan sola que me estoy ahogando, me ahogo en un pozo de color oscuro en el que unos brazos tiran de mí hacia el fondo. Y me ahogo, cada vez duermo menos y llora más. Soy una llorica en busca de un abrazo.
Soy una llorica en busca de algo cariño, aunque sea efímero.
Me veo en ese pozo, con más allá de la cintura hundida, sin nadie que agrre esa mano que está a punto de desasirse y que nadie agarrará cuando llegue el momento.
¿Quién agarraría a alguien como yo?
He pensado que de verdad odio estar sola y ver mogollones de parejas por todos lados... ¡Odio a todo aquello que me hace caerme a ese pozo del que ya no puedo salir!

domingo, 18 de septiembre de 2011

Fotografía.


¿Alguien mirará los álbumes de fotos en los que salgo con pañales? ¿O con solo los dientes de delante? ¿En los que mi pelo cambia de color? ¿En los que sonreía de verdad?
¿Y quién los mire los mirará con interés? ¿O le parecerá una vida aburrida? ¿Mirará esas fotos donde hay miles de recuerdos con curiosidad? ¿Inventará historias de cada foto? ¿O me buscará para preguntar?
Me pregunto si algún día esas fotos se perderán o se quemarán. Si con ellas se irán los recuerdos.
La verdad no quisiera olvidar los días con mis abuelos, ni cómo aprendí a montar en bici, quisiera que esas fotos durasen para siempre, quisiera tener unos nietos a quien enseñárselas y, a pesar de lo caro que puede ser un carrete y su revelado, quisiera hacer un álbum de todos mis hijos, si es que llego a tener alguno.
Puede que esos álbumes en los que yo salgo, queden en el olvido pero hay retratada una vida. Una vida de una frágil pero rebelde persona, que intenta hacerse un hueco en un mundo que la rechaza y que ella rechaza.