lunes, 5 de diciembre de 2011

Capítulo 7.

Hoy es un día de locos.
Es la semana de los días salteados.
Hoy se ha levantado pronto, cuando ha sonado su alarma a las 10. Le ha costado levantarse porque tenía un sueño precioso.
Desayuna y se lava los dientes; tiene que estar presentable para Pablo, el de los ojos gris luna.
Pero cuando llega al dentista no está, se entristece un poco pero allí está Rosa para hacerla sonreír.
-Odio el invierno. -dice la joven.
-Yo también. -dice Lara. -Ojalá siempre fuese verano. ¿No mudamos a la playa?
-Ojalá pero me gusta demasiado Madrid. -dice la recepcionista pizpireta.
"Otra que adora Madrid, como yo." piensa. A Lara le encanta Madrid, no sabe por qué. Quizá porque no conoce otras ciudades, quizá porque casi no ha salido de Madrid. Pero Madrid es su ciudad preferida, le gustaría nunca dejarla; poder tener trabajo allí, enseñar la magia que tiene Madrid.
Madrid es la ciudad favorita de Lara porque tiene zonas verdes enormes y un montón de bosques; también hay una ciudad con glamour con sus esculturas romanas, sus miles de siglos esperando en cada rincón y el arte, el arte que se respira en cada calle. Los miles de museos que están en cada rincón de cualquier calle.
El dentista tarda más de lo debido.
-No me va a dar tiempo para ir a pagar el First. -murmura. Y así es, cuando termina, es casi hora de irse a clase.

Coge el autobús, pensando en lo que le dijo a Rubén.
Y ella es bohemia, demasiado soñadora. Piensa vivir en un ático de parquet y paredes forradas de papel. Y su amor sería con alguien con el que sentarse en aquella casa bohemia, besarle y cantarle canciones mientras aprende a tocar la guitarra; dar pequeños conciertos encima del colchón mientras quién está con ella sonríe. Le encantaría vivir de lo que escriba. Claro, ella tiene 20 años.

Y Rubén es de esos chicos prácticos que buscan una casa con jardín, una mujer que le haga reír, que le haga la comida y le sonría en todo momento; alguien con el que vivir sea simple, que tenga un trabajo  menos bohemio, que quiera tener hijos ya. Él tiene 28, es normal que quiera algo más a largo plazo que ella.

Entonces piensa en lo que le dijo Patry.
-Busca un lugar en el que haya gente con la que te vayas a llevar bien y ¡lánzate!
Ella quiere ir a la universidad, tener amigos de allí, que tenga unos objetivos como los ella. Quiere divertirse fuera, quiere salir del cascarón que es su casa.
Y él querría alguien con el que estar siempre, con el que compartir cosas. Y él no tendría colegas en Madrid, se quedaría solo en casa mientras ella está de marcha con los demás.
Y Lara cada vez le menos posibilidades a cumplir lo que ha prometido.

1 comentario:

  1. Me gusta la forma de narrar que tienes. Es... especial, muy personal. =) Espero que continúes pronto y te animes a pasarte por mi blog. Tu opinión sería muy importante para mi, sobre todo en la última entrada que he publicado. ¡Muffinazos para TU!
    PD: I ♥ Madrid too.

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