Hola pequeños y pequeñas.
Hoy, por fin, he ido al médico para hacerme la prueba de embarazo. Y, al parecer, el médico me ha dicho que, si hace un mes y medio que no he tenido la regla y no siento nada extraño, seguramente sea un retraso por cualquier gilipollez. Aún así me va hacer un test mediante sangre a ver qué me sale.
Así que el miércoles me toca levantarme pronto para ir a los análisis y llevar una muestra de orina.
Ahora estoy creando un epub de todos los relatos de Hollie Deschannel, no es por robárselos ni nada pero es que sus epubs me salen descompensados en el Android así que me los estoy haciendo yo con títulos, índice interactivo y demás.
Además, de que, quizá, la próxima semana me tatúe porque una chica de Westeros me ha contado que el primo de su novio los hace y solo me cuesta 50 euros así que voy a aprovechar.
Este fin de semana, ha sido una mierda y, a la vez, la caña.
El viernes quedé con Mari y Riku para ir a la presentación de Ana Elena Coto y su libro El Secreto del Valle de las Sombras.
La presentación fue en la Central de la ONCE porque la autora quiere presentar el libro en audio y en braille para los ciegos, además de que, supuestamente, está inspirada en los minusválidos. Así que fuimos y a mí y a Mari se nos cayó la baba con todos los perros que había.
Luego, nos fuimos a FNAC Callao para comprar un libro para el hijo de una amiga de Bea, la hermana de Mari, así que nos tiramos un cuarto de hora en busca del libro que su hermana quería. Al final dimos con uno que parecía que le gustaría. Pagamos y nos fuimos.
Cuando volví a casa me di cuenta de que había perdido 10 euros. Así que me cagué en la madre del puto billete y de todo.
El sábado, como dormía en casa de Mari, pues decidí pasarme a por las entradas de Rammstein pero, al ir, me dijo la chica que necesitaba mil cosas para sacar las entradas así que tengo que llevar todas las cosas que me piden. El caso es que ese día perdí mi caja de cigarrillos de metal de Resident Evil con un mogollón de cigarrillos.
Pero el domingo fue la poya. Nos reímos mogollón, sobre todo con la cabra bizca del juego de ella y mil cosas más.
Así que en resumen, fue un finde de alucine.
¿Qué habéis hecho vosotros este fin de semana?
Un besazo.
Hoy, por fin, he ido al médico para hacerme la prueba de embarazo. Y, al parecer, el médico me ha dicho que, si hace un mes y medio que no he tenido la regla y no siento nada extraño, seguramente sea un retraso por cualquier gilipollez. Aún así me va hacer un test mediante sangre a ver qué me sale.
Así que el miércoles me toca levantarme pronto para ir a los análisis y llevar una muestra de orina.
Ahora estoy creando un epub de todos los relatos de Hollie Deschannel, no es por robárselos ni nada pero es que sus epubs me salen descompensados en el Android así que me los estoy haciendo yo con títulos, índice interactivo y demás.
Además, de que, quizá, la próxima semana me tatúe porque una chica de Westeros me ha contado que el primo de su novio los hace y solo me cuesta 50 euros así que voy a aprovechar.
Este fin de semana, ha sido una mierda y, a la vez, la caña.
El viernes quedé con Mari y Riku para ir a la presentación de Ana Elena Coto y su libro El Secreto del Valle de las Sombras.
La presentación fue en la Central de la ONCE porque la autora quiere presentar el libro en audio y en braille para los ciegos, además de que, supuestamente, está inspirada en los minusválidos. Así que fuimos y a mí y a Mari se nos cayó la baba con todos los perros que había.
Luego, nos fuimos a FNAC Callao para comprar un libro para el hijo de una amiga de Bea, la hermana de Mari, así que nos tiramos un cuarto de hora en busca del libro que su hermana quería. Al final dimos con uno que parecía que le gustaría. Pagamos y nos fuimos.
Cuando volví a casa me di cuenta de que había perdido 10 euros. Así que me cagué en la madre del puto billete y de todo.
El sábado, como dormía en casa de Mari, pues decidí pasarme a por las entradas de Rammstein pero, al ir, me dijo la chica que necesitaba mil cosas para sacar las entradas así que tengo que llevar todas las cosas que me piden. El caso es que ese día perdí mi caja de cigarrillos de metal de Resident Evil con un mogollón de cigarrillos.
Pero el domingo fue la poya. Nos reímos mogollón, sobre todo con la cabra bizca del juego de ella y mil cosas más.
Así que en resumen, fue un finde de alucine.
¿Qué habéis hecho vosotros este fin de semana?
Un besazo.
¡Suerte con el análisis!
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